¿Cómo evitar que tu equipo quiera escapar?

Piensa en esto: un empleado recibe una oferta laboral con un salario apenas superior al que ya tiene. ¿Se va? Probablemente no, si se siente valorado, motivado y parte de algo importante. Pero si su líder es inconsistente, desmotivador o indiferente, la respuesta será un rotundo sí.

Y aquí está la clave: las empresas no pierden talento por dinero, lo pierden por liderazgo. De hecho, según Gallup (2017), el 75 % de las renuncias se deben a problemas con los líderes directos y no a la organización en sí.